Hoy nos adentramos en otros estilos musicales para ir conociendo fotógrafos de los que tenemos mucho que aprender, como Jaime Oriz. El es un fotógrafo multidisciplinar dentro del panorama zaragozano.
JAIME ORIZ
Jaime Oriz
Equipo fotográfico: Para los conciertos NIKON 750 con dos objetivos: 24-70 F2.8 Y 70-200 F2.8 NIKKOR
¿Cómo empezaste en el mundo de la fotografía? ¿qué te llevó más concretamente a la fotografía de conciertos?
Llevaba varios años trabajando como periodista en varios medios de comunicación y colaborando en webs musicales (Aragón Musical), realizando críticas de conciertos. Siempre me había interesado mucho el mundo audiovisual y cuando pude me compré una asequible cámara réflex para disparar en directo, solo como hobbie. Luego ya me lo tomé en serio y la cosa se complicó para bien.
¿Cómo te sientes cuando estás en plena faena? ¿Cuáles son tus rituales? ¿Qué buscas en el campo de batalla?
No tengo rituales, pero lo primero que siempre hago es asegurar una foto en la que se vea bien al líder o líderes de la banda, para que pueda ser publicada sin problemas. Luego ya me dejo llevar, siempre buscando un momento o composición lo más original posible.
¿Cómo imaginas la foto perfecta? ¿Esa que todavía está por llegar?
Como decía antes, me gustan los momentos diferentes. No me suelen interesar las fotos perfectamente encuadradas en la que se muestra al artista de turno. Hoy en día, con los medios que tenemos, es muy fácil de conseguir. Por eso me gusta jugar con luces, colores, encuadres complicados o momentos interesantes. Espero sinceramente que mi mejor foto este por llegar.
¿Eres de los que opinan que esta profesión está poco valorada? ¿Cómo ves la situación de la fotografía de conciertos en particular?
Claro que está poco valorada. Y tenemos mucha culpa nosotros. Es un afición muy jugosa y que hincha el ego. Por lo que a los artistas o medios les es muy fácil conseguir imágenes gratuitas o muy baratas. Por otro lado, gente que se dedique plenamente a su música hay muy poca, así que gastan lo justo. No ven un gasto necesario una buena foto. Creo que se equivocan.
¿Nos puedes mostrar cuál es la imagen de la que estás más orgulloso? ¿Por qué?
Es una foto que no he usado mucho y tampoco ha tenido el recorrido de otras, pero creo que refleja a la perfección a qué suena el grupo. Además, me costó muchísimo conseguirla. Son Yo La Tengo en la Sala Oasis. No suelo jugar con desenfoques en movimiento, pero en mi cabeza no había otra cosa que exactamente lo que logré con esa foto. Estoy muy orgulloso.
¿Trabajas para algún medio o has colaborado en algún proyecto en algún momento? ¿Qué tal la experiencia?
He trabajado como fotógrafo de varios festivales (Pirineos Sur, Festival de Jazz de Zaragoza, Estoesloquehay…) y colaboro desde hace muchos años con Mondo Sonoro. Aunque algunas de mis fotos se han publicado en Rockdelux, Heraldo de Aragón, El País o El Mundo.
Para realizar este tipo de fotografía el trabajo está estrechamente relacionado con la relación con el promotor, las salas, las bandas…, ¿cómo ves estas relaciones?¿Cómo está el terreno en Aragón?
Bastante bien. Hoy en día si una banda no logra tocar en una sala de Zaragoza es que algo está haciendo mal, porque hay una gran variedad, que albergan todo tipo de estilos. Otra cosa es el público. La situación es complicada, pero muchas veces son los propios artistas los que no gestionan bien su propia promoción como deberían. Lo que hablábamos, ¿cuántas bandas inviertan en una buena imagen, en un buen vídeo o una hoja de promoción? Debemos hacer entre todos un poco de auto crítica.
¿Basta la calidad de un buen trabajo fotográfico o crees que hoy en día hay que trabajarse también las relaciones públicas (redes sociales, contactos, amigos…) para poder conseguir que se valore realmente lo que haces?
Yo soy muy activo en redes sociales porque son fundamentales, pero me da muchísima pereza. A menos que seas alguien completamente consagrado (y existen muy pocos en el mundo en este sector), te lo vas a tener que trabajar mucho en redes sociales. Y como todo en este mundo, es fundamental estar en contacto con bandas, agencias de comunicación, promotores, salas…
Una queja bastante común en los fotógrafos ¿cómo llevas el hecho de que te “roben” fotografías que han sido publicadas por internet? El que te publiquen sin nombrar autoría, corte de firmas, capturas de pantalla…
Pues mal, pero ya lo tengo asumido. Según en que espacios ni me molesto en decir nada. Y eso que a mí me basta con que me pidan permiso y me nombren. Si es un medio de comunicación importante sí que me molesta especialmente y tomo las medidas oportunas. Al igual que con las bandas, si las usan como promoción sin mi permiso, pido que las retiren o me las paguen. Vamos, lo normal.
¿Qué banda has disfrutado más fotografiando? ¿con cual has sufrido más? ¿y a cual te gustaría fotografiar? ¿Alguna anécdota?
Pues tal vez Los Planetas. Los disfruto mucho porque es una de mis bandas favoritas y porque es probablemente la más difícil de fotografiar porque siempre juegan con contraluces. Pocas veces he visto imágenes convincentes de ellos y creo que yo las conseguí.
También sufrí mucho pero logré un gran resultado en un espectáculo del bailarín Miguel Ángel Berna.
Mi gran foto pendiente: U2.
¿Cómo está el terreno entre los compañeros de profesión? ¿Nos podrías recomendar a un fotógrafo del género de conciertos que realmente admires o de cualquier otro ámbito?
En Zaragoza hay un nivel muy alto y no me gusta dejarme a nadie fuera. Pero voy a nombrar a los dos que más me han inspirado a buscar un enfoque diferente: Gustaff Choos y Pedro Anguila.
¿Aparte de la fotografía de conciertos que otro tipo de fotografía te gusta? ¿cuál te desagrada y por qué?
La fotografía es mi trabajo, por lo que realizo cualquier tipo de encargo. De hecho, la de conciertos es la más complicada para que ofrezca beneficios. Por ejemplo, las bodas, que muchos profesionales les parecen más aburridas, yo las veo un poco como un concierto: momentos únicos e irrepetibles que tienes que estar siempre atento para ofrecer algo distinto. Aunque también me gustan mucho los retratos. De hecho, ahora me supone un mayor reto plasmar en una imagen la personalidad de un artista.
Lo que menos, tal vez, las fotos de bebés. No hay mucho que hacer con ellos y son todas iguales.
Gracias a Jaime Oriz por esta entrevista.